lunes, 1 de octubre de 2018

Resumen de Historia 1ºESO


Prehistoria
Durante la Prehistoria surgieron sobre la Tierra los primeros antepasados de la especie humana, que evolucionaron a través de un largísimo proceso conocido como “hominización”.

En este amplísimo periodo de tiempo se produjeron importantes cambios culturales para la especie humana: el empleo masivo de herramientas, se descubre el fuego, se inicia la domesticación de ciertas especies animales y se desarrolla la agricultura, así como la metalurgia. También se realizaron las primeras manifestaciones artísticas (pinturas rupestres y talla de pequeñas estatuillas como la Venus de Willendorf).

La Prehistoria se dividió en 3 etapas:
  • El Paleolítico empieza hace unos 4,4 millones de años con la evolución de los homínidos, desde el Ardipithecus, pasando por el Australopithecus, Homo Habilis, Homo Erectus y Homo Neanderthalensis, hasta el actual Homo Sapiens (desde el 195.000 a.C. hasta la actualidad) Fue un periodo muy largo de escasos avances tecnológicos. Los primeros homo sapiens vivieron en cuevas, vestían con pieles y eran capaces de fabricar herramientas muy rudimentarias con piedra, huesos y otros materiales naturales. La escased de alimentos les obligaba a llevar una vida nómada. Sus manifestaciones artísticas revelan representaciones pictóricas de personas, animales y otras formas básicas. Practicaban rituales funerarios (lo que implica preocupación por el más allá)
  • El Neolítico se encuentra en torno al 10.000 a.C hasta el 4.500 a.C. Se caracteriza por el inicio de la agricultura, ganadería y el paulatino sedentarismo de la especie humana. Los asentamientos se hacen más grandes y la población aumenta en determinadas zonas geográficas (normalmente ligado a la fertilidad de los suelos en los valles de los grandes ríos). La producción de comida aumentó y también se cultivaron especies vegetales para la confección de vestimentas. La mejora en las técnicas constructivas permitió la edificación de cabañas más resistentes lo que condujo a una mejora significativa en su calidad de vida. Las sociedades, al ser más numerosas, también se fueron sofisticando en cuanto a diferenciación social (clases sociales) y profesional (nuevas ocupaciones: alfarero, tejedor, escultor, agricultor, ganadero, etc...) Cabe destacar la invención de la cerámica, lo que permitió contener líquidos y otros alimenos para su transporte, conservación o cocinado.
  • la Edad de los Metales es un periodo comprendido entre el 4.500 a.C. y el 1000 a.C. (aunque no en todas las civilizaciones se dieron al mismo tiempo) en el que se descubrió la metalurgia (Edad del Cobre, Edad del Bronce, Edad del Hierro) permitiendo así la fabricación de mejores y más eficaces herramientas que sus predecesoras (hechas a base de piedra mellada del Paleolítico y piedra pulida en el Neolítico). Ello contribuyó a una mejora en la producción de todo tipo de utensilios y armas. También se inventó la rueda. En el ámbito cultural se construyeron estructuras megalíticas como los Dólmenes de Menga (Antequera), la Naveta de Tudons (Menorca), o el cromlech de Stonehenge (UK)


Mesopotamia
Las sociedades mesopotámicas se dieron en Oriente Próximo entre los ríos Tigris y Eufrates. En ella se fueron sofisticando las sociedades hasta formar los primeros estados (reinos o imperios), es decir, que el poder y la organización política traspasó el ámbito local (la aldea) para controlar vastos territorios bajo el mando de una única persona que concentraba todos los poderes. El control del territorio mesopotámico se lo disputaron distintos pueblos:
  • Sumerios (del 3500 aC al 2300a.C)
  • Acadios (2300 aC al 2140 a.C.)
  • Babilonios (1800 aC al 1600 aC)
  • Asirios (1500aC al 500aC)
  • Desde el 539aC Mesopotamia se integra en el imperio persa.
En los últimos 5000 años del Neolítico surgieron las primeras civilizaciones fluviales a lo ancho del globo, desde el Nilo, pasando por Mesopotamia, el río Indo y el Huang He. La productividad de sus tierras permitió un incremento de sus poblaciones así como el establecimiento de redes comerciales que sirvieron de intercambio cultural entre zonas relativamente alejadas. Se desarrollaron distintos sistemas de escritura y las sociedades se fueron haciendo cada vez más complejas.
El poder político surgió de la necesidad de organizar el trabajo colectivo, la distribución de las aguas entre los agricultores, de la conservación de los canales de riego o la defensa de la ciudad. Dicho poder recayó en príncipes y reyes que concentraban el poder político, militar y religioso, y fueron considerados dioses o intermediarios entre los dioses y el ser humano. Para ejercer su dominio se valieron de funcionarios y sacerdotes, y crearon grandes ejércitos para sus conquistas. Con la acumulación de victorias militares frente a pueblos cercanos se dieron los primeros imperios.
La economía era básicamente agrícola; no obstante las abundantes cosechas permitieron el desarrollo de otros oficios: alfareros, tejedores, orfebres, canteros, etc... También se incrementó el comercio al tener mayores excedentes de alimentos y contar con un medio de transporte propicio para mover muchas mercancías: la navegación fluvial.
La sociedad se hizo más compleja formándose distintos grupos sociales, diferenciados por su riqueza o por su prestigio social. En general, una minoría de privilegiados que incluía al rey, a altos funcionarios, sacerdotes y jefes militares, sometían a la mayoría de la población (agricultores, ganaderos y artesanos) obligándoles al pago de elevados impuestos.
La cultura y la ciencia se desarrollaron y los reyes y emperadores potenciaron el arte con la construcción de grandes edificaciones lujosamente decoradas, como palacios, templos y tumbas.
En las sociedades mesopotámicas destacan el zigurat como templo-fortaleza y los restos arqueológicos de la antigua ciudad de Babilonia que evidencia una enorme complejidad social, riqueza cultural y de la que tenemos abundantes restos arqueológicos. En Mesopotamia se usó el arco y la bóveda por primera vez en la Historia como técnica constructiva.
El sistema de escritura que desarrollaron se conoce como escritura cuneiforme, realizada con un objeto afilado sobre tablillas de arcilla blanda. Se redactaron numerosos documentos de tipo administrativo (contabilidad de la producción de alimentos y artesanía), legal (leyes, normas y sanciones como el famoso código de Hammurabi) así como literatura (el poema de Gilgamesh) y documentos científicos (registro Histórico, estudios astrológicos, tratados matemáticos, fórmulas contables y sistemas de medición)

Egipto
La civilización egipcia fue un imperio fluvial a lo largo del Nilo que duró cerca de 3000 años, desde el 3100 aC en el que el faraón Menes unifica Egipto hasta la conquista de Alejandro Magno del imperio Helenístico en el 331 aC.
El antiguo Egipto se caracteriza por la concentración de poder en el faraón que se consideraba un dios encarnado en un ser humano (por lo que no sólo tenía el poder político y militar sino también religioso).
Los egipcios desarrollaron su propio sistema de escritura pictográfica (a base de dibujos) conocido como escritura jeroglífica, que posteriormente (en los últimos siglos del imperio) evolucionó hacia la escritura demótica.
Fueron una civilización politeísta con firmes creencias de ultratumba: construían enormes y complejos templos que servían de cámaras funerarias y realizando sofisticados procedimientos de conservación de cadáveres como el embalsamamiento de los difuntos (momificación).
Las crecidas anuales de Nilo permitió las recurrentes inundaciones de sus riberas, lo que humedecía esas tierras y las fertilizaba naturalmente con sus limos. La construcción de diques y acequias permitió un gran desarrollo agrícola, lo que permitió tener enormes excedentes para una población creciente y un comercio abundante.
Los inicios del imperio, en torno al 5000 aC, se caracterizó por el auge de ciudades-estado gobernadas por monarcas o gobernadores hasta que en el 3100 aC el rey Menes unificó todas las ciudades del Alto y Bajo Egipto en un mismo reino, comenzando así el imperio egipcio.
La sociedad egipcia fue muy jerarquizada, con el faraón el la cúspide (incluyendo su familia, nobles y sacerdotes. Eran los propietarios de las tierras. Los nobles se encargaron de desempeñar los altos cargos políticos y administrativos, así como generales de los ejércitos, siempre al manos del faraón.
Los sacerdotes se encargaban de realizar el culto a los dioses, conservar los templos y administrar sus extensas propiedades.
El nivel social intermedio lo formaban comerciantes enriquecidos, artesanos especializados y escribas (los únicos que sabían leer y escribir)
En el nivel inferior estaban el resto de personas libres, en su mayoría campesinos, artesanos y pequeños comerciantes, soldados y sirvientes. Los esclavos, escasos y en su mayoría extranjeros, eran los más desfavorecidos.
Del legado cultural destacamos la escritura jeroglífica, descifrada gracias al descubrimiento de la piedra Rosetta. También hay numerosos templos y tumbas (mastabas, pirámides escalonadas, pirámides regulares e hipogeos) Son muy conocidas las esfinges y estructuras arquitrabadas con enormes columnas decoradas con grabados y relieves, capiteles de distinta forma (palmiforme, lotiforme, papiriforme,...) En la pintura destaca una posición característica conocida como “ley de la frontalidad“ en la que la persona representada tiene las piernas y cabeza de perfil y el tronco y el ojo de frente.

Grecia
En la antigua Grecia surgieron nuevas maneras de entender al ser humano y nuevas formas de gobierno: la democracia.
Grecia se considera también cuna de la civilización europea ya que su aportación tuvo enorme calado en las futuras civilizaciones del continente.
Se distinguen 3 épocas:
  • Época arcaica (del 700 aC al 500aC)
  • Época clásica (500aC al 300aC)
  • Época helenística (del 300aC al 30aC)
Sus orígenes se remontan a la antigua civilización Minoica en la isla de Creta. Tras ser invadidos por los Micénicos procedentes de la península de los Balcanes, se fueron desarrollando múltiples ciudades-estado en las orillas del mar Egeo. El montañoso relieve de Grecia dificultó la conexión entre sus ciudades, lo que favoreción su caracter independiente.
Las polis (ciudades-estado) fueron expandiéndose por la costa norte mediterránea mediante el cabotaje (navegación cercana a la costa) y formaron factorías allá donde los recursos naturales eran abundantes para nutrir a las polis de materias primas. Dichas factorías fueron creciendo de población hasta formarse colonias (ciudades que debían lealtad a la polis de origen) Gracias a las constantes migraciones de las atestadas polis a las incipientes colonias, la cultura griega se difundió por todo el Mediterráneo entre lo que puede destacarse la metalurgia del hierro, el alfabeto, el urbanismo, el uso de la moneda y el arte griego en todas sus manifestaciones (arquitectura, pintura, escultura).
Durante la Época Clásica destacaron dos polis: Atenas y Esparta. A principios del siglo V aC los persas intentaron conquistar Grecia lo que fue conocido como las guerras médicas. La mayoría de las polis se unieron ante el enemigo común, aunque el ejército de Esparta y la flota de Atenas fueron decisivos para la victoria en las ballas de Maratón (490aC) y Salamina (480aC) Al finalizar la guerra Atenas demostró ser la polis más poderosa y formó la Liga de Delos: una alianza entre las polis para prevenir futuros ataques de los persas. El excesivo protagonismo de Atenas provocó la guerra contra Esparta (guerra del Peloponeso, del 431aC al 404aC) saliendo victoriosa Esparta.
En la época helenística destaca Alejandro Magno, que en sus 30 años de gobierno, realiza conquistas por todo Oriente Próximo, hasta Egipto y luego fue conquistando miles de kilómetros hasta llegar al rio Indo (actual India). Fundó muchas ciudades con su nombre (Alejandría de...) A su retorno murió y su reino fue dividido entre sus 3 generales. Fueron reinos débiles que fueron aplastados por los romanos en el 30aC e incluidos desde entonces al imperio romano.
Atenas y Esparta supusieron dos modelos diferentes de gobierno:
  • Esparta se gobernaba mediante la oligarquía aristocrática. El poder lo desempeñaban dos reyes y un Consejo de ancianos elaboraban las leyes. La asamblea de ciudadanos tenía un poder consultivo y sólo lo formaban los varones mayores de 30 años, de padre y madre espartanos
  • Atenas adoptó la democracia (en la que sólo podían participar los varones mayores de 10 años de padre y madre atenienses. El poder recaía en la Asamblea o Ecclesia que discutían y votaban las leyes, además de elegir a los magistrados (cargos públicos) y a los tribunales de justicia.

En cuanto al arte destaca:
  • en arquitectura la construcción de templos normalmente formados por un perímetro de columnas con techumbre arquitrabada y tejado a dos aguas, con frontón (pieza triangular frontal que une el arquitrabe con el tejado) con esculturas en relieve. También contruyeron teatros, casas y santuarios.
  • De la pintura griega quedan pocos restos, la mayor parte en cerámicas como motivos de decoración.
  • En la escultura destacamos la increible evolución desde su época arcaica (esculturas frontales, muy rígidas e inexpresivas, como por ejemplo los Kuroi), pasando por la época clásica (mayor expresividad y naturalidad, destancado el Discóbolo de Mirón o el Dodíforo de Policleto) y la máxima expresividad alcanzada en su época helenística (por ejemplo el grupo escultórico del Laocoonte y sus hijos).
  • Teatro: crearon representaciones teatrales de mitos y leyendas. Diferenciaron los géneros teatrales de la tragedia y la comedia.
Los griegos destacaron en el pensamiento racional (base del método científico) y tuvieron a grandes pensadores que realizaron un increible legado cultural en todas las disciplinas: Matemáticas, Física, Geografía, Historia, Astronomía, Filosofía,...
Eran politeístas y desarrollaron una increible literatura mitológica en torno a sus dioses: Zeus, Hera, Hermes, Afrodita, Atenea, Hefesto, Hades, Ares, Deméter... También idearon mitos de semidioses (héroes) como Jason, Hércules o Aquiles.


Roma
La ciudad de Roma sometió por la fuerza a muchos pueblos: griegos, egipcios, macedonios, fenicios y pueblos como los celtas y los íberos de la península ibérica. Su enorme imperio llegó a conquistar todos los territorios que bañan en Mediterráneo al que denominaban como “mare nostrum” (mar nuestro)
Roma tuvo una primera fase monárquica, de 753 AC (fundación de Roma) hasta el 509aC en el que se formó una República. En esta segunda fase se creó el Senado y los Comicios como órganos de gobierno de tinte democrático, nombrando a magistrados que tenían diversas funciones:
  • Cónsul: dirigía el imperio
  • Pretor: impartía justicia
  • Cuestor: cobraba impuestos
  • Censor: elaboraba el censo de población
  • Edil: administraba el gobierno local de las ciudades
  • Tribuno de la plebe: defendía los intereses de los plebeyos.

La sociedad romana estaba dividido en plebeyos (la inmensa mayoría de la población: artesanos, campesinos y comerciantes) y patricios (familias ricas y poderosas que se consideraban descendientes de los fundadores de Roma).
En la tercera etapa, la civilización romana adopta la fórmula imperial (el emperador como lider supremo que concentraba todos los poderes y gobernaba sobre un enorme territorio). Fue el momento de máxima expansión de sus dominios, llegando desde Britania al norte de África, desde Hispania a Siria. Administraron su enorme imperio por provincias (provincias del tamaño de países actuales que luego fueron subdividiéndose en provincias más pequeñas)
Su economía se basó en la agricultura de la triada mediterránea (trigo, vid y olivo), la ganadería, la artesanía y el comercio entre las distantes provincias del imperio.
Fueron una civilización muy militarizada, con un ejército creciente para ampliar sus conquistas y defender sus fronteras. Su concepto de paz (pax romana) consistió en someter a sus enemigos militarmente, eliminando así el riesgo a ser invadidos.
En su expansionismo militar, se produjo un proceso llamado “romanización” en que que absorbían rasgos culturales de los conquistados y se imponían la cultura romana. Por tanto su influencia por toda la geografía fue enorme, transformando sus costumbres y creando una cultura de rasgos comunes.
El imperio entró en una larga decadencia caracterizada por la corrupción, la pobreza generalizada, la inseguridad (lo que imposibilitó el comercio) y las incursiones bárbaras que amenazaban las fronteras. Finalmente el imperio fue dividido por Teodosio I en el 395dC: el imperio de Occidente con capital en Roma, y el imperio de Oriente con capital en Constantinopla. Finalmente el Imperio Romano de Occidente caería ante los germanos en el 476dC mientras que el Imperio Romano de Oriente aguantaría hasta 1493, año en que los Turcos tomarían Constantinopla.
Los romanos fueron grandes constructores que mejoraron ciertas estructuras de pueblos absorbidos como por ejemplo el anfiteatro como mejora del teatro griego. Construyeron multitud de puentes (muchos de ellos se conservan hasta nuestros días), acueductos, murallas, termas, templos, monumentos, teatros, circos, anfiteatros, calzadas e incluso redes de alcantarillado. Sus materiales constructivos fueron el ladrillo, la piedra, el marmol y el mortero (mezcla de cal, piedras y arena que se endurecía al mezclar con el agua). Abundan los arcos, bóbedas y cúpulas como técnica constructiva. Destacan el Coliseo romano (anfiteatro Flavio), el acueducto de Segovia, y el Panteón de Roma.
Las aportaciones más importantes de la cultura romana a la posteridad fueron el latín (lengua oficial del imperio de la que derivan muchas lenguas europeas actuales), el derecho o leyes escritas para regular las relaciones entre las personas (derecho privado) y el Estado (derecho público). Además Roma aportó destacados médicos (Galeno), filósofos (Séneca), literatos (Virgilio) e historiadores (Julio César y Tito Livio).
En cuanto a la religión los romanos fueron en sus orígenes politeístas, adoptando dioses de provincias de su imperio (cogieron los dioses griegos y les cambiaron el nombre) e incluso aceptaron dioses orientales. El cristianismo fue prohibido en los primeros siglos de nuestra Era y los cristianos fueron perseguidos y martirizados, lo que les obligó a profesar su religión en la clandestinidad. Más tarde, el emperador Constantino promulgó mediante el Edicto de Milán, en el 313dC, la libertad religiosa en el imperio, permitiendo el culto del cristianismo. En el 380dC, Teodosio I, mediante el Edicto de Tesalónica, hizo del cristianismo la religión oficial del imperio.
En España tenemos abundantes restos arqueológicos de los romanos ya que hubo grandes ciudades en nuestra geografía: Gadir, Emérita Augusta, Caesar Augusta, Itálica, Baelo Claudia, Numantia, Septimanca...
La influencia de la cultura romana a las futuras civilizaciones europeas fue inmensa.


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